Saliendo de Barcelona hacia el NE a poco andar encontramos la Costa Brava.
En noviembre todas la ciudades y pueblos de la costa están con sus habitantes permanentes, esto es, sin turistas. Así todo es para tí.
Y es bonito ver como conviven la montaña y el mar.
No pongo en duda la magia de la naturaleza, en todo caso, agradezco su generosidad al permitirle al hombre desarrollar su capacidad e ingenio para meter casas dentro de la montaña.
Esto es Rosas a pocos kilómetros de la frontera con Francia.
1 comentario:
Que bonito paisaje!!!! que suerte estar allí y mostrar todo eso.....un beso enorme desde Argentina: Andrea
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